El de hoy ha sido día de juzgados. Yo, en los de la Plaza de Castilla, como demandante, para empapelar otra vez a un mamarracho de la Cadena SER llamado Quequé, a quien hace ya más de un año condenó la Audiencia a pagarnos 50.000 euros por lo que jurídicamente se denomina ‘intromisión ilegítima’ en mi honor. Que no fue otra cosa que etiquetarme 16 veces como ‘subnormal’ en antena, además de otras tropelías con el apoyo, el respaldo y el aplauso de su pringoso grupo mediático. Como la sentencia le obligaba a borrar los insultos de sus redes y a publicar el fallo, y el tipo no lo ha hecho, ha tenido que apoquinar 500 euros al mes de sanción. Pero el majadero alardea de que esa pasta es su mejor inversión. Y nosotros, por lo de poner las cosas en su sitio, hemos vuelto a la carga. Argumentando que desafiar así a la Justicia debería tener un precio. Esperamos que en billetes: en esas ‘chistorras’ de 500, ‘soles’ de 100 y ‘lechugas’ de 50, con que el PSOE pagaba de tapadillo y en ‘B’ al putero Ábalos, al capo Sánchez y a toda la cuadrilla. Hoy ha peregrinado Ábalos hasta el Tribunal Supremo, a tratar de explicar ese léxico mafioso y de dónde salía la pasta. Pero no me parece lo relevante. Lo mollar, lo importante, lo que tendrá consecuencias a medio plazo, es que el marido de Begoña —durante la entrevista masaje que le administró la señorona Barceló en la SER— confesó que él también pillaba ‘sobres’ como esos y que se trata de algo ‘normal’. Utilizó el paisano deliberadamente —no sea que se le vuelva en contra algún día— la fórmula: ‘he podido cobrar algunas facturas en efectivo’. Mi duda, y supongo que la de ustedes,…
The post Alfonso Rojo: “Los de las chistorras eran Ábalos y Koldo, pero el gran chorizo es Sánchez”. appeared first on Periodista Digital.