
Bassala Bagayoko tiene 19 años y ha vivido ya las dos caras del deporte de élite. El joven pívot de Malí que hoy juega en el Bilbao Basket echa la vista atrás y contempla una corta carrera que une los dos extremos. De la explosión de la fama al túnel más oscuro. De convertirse en el jugador más joven en debutar en la historia de la ACB por delante de Ricky Rubio, registro que todavía mantiene, a pasar más de dos años sin jugar por culpa de una lesión. Hoy Bagayoko vuelve a empezar. Como si todo aquello, lo bueno y lo malo, no hubiera sucedido y él simplemente fuera un adolescente que intenta abrirse camino en la Liga española de baloncesto. Aunque ahí siguen las vivencias en el alma y las cicatrices en el cuerpo para recordarle de dónde viene. “Todo lo que he pasado me ha hecho ser quien soy”, comenta el muchacho.





