A veces no hace falta hacer grandes reformas en la cocina para que luzca completamente diferente; simplemente cambiar una cosa de un lado a otro, incluir un pequeño detalle o, sencillamente, cambiar la estética al renovar, ya sea la lámpara de techo, el frutero, la cafetera o, sencillamente, el cubo de basura, puede transformar por completo tu sensación al entrar en la cocina. Es cierto que renovar el cubo de basura, a priori, no da la sensación de que vaya a cambiar mucho, pero, si lo tienes a la vista y es de gran tamaño, puede aportar mucho estilo al espacio.