
El 4 de noviembre está marcado en rojo para los accionistas de Telefónica. Además de presentar resultados, la operadora celebrará su Día del Inversor, el primero bajo el liderazgo de Marc Murtra. El encuentro con analistas y gestores servirá para conocer las intenciones del presidente diez meses después de asumir el cargo tras la dimisión de José María Álvarez-Pallete. Entre los inversores pesan dos dudas: el futuro del dividendo y la posibilidad de una ampliación de capital para reforzar el balance. En la jornada previa al evento, las acciones de Telefónica caen un 2,17%, la segunda cotizada con peor desempeño de la sesión.






