El cantante de la banda británica Lostprophetx, Ian Watkins, de 48 años, ha muerto tras ser atacado en la prisión de Wakefield, en la que cumplía condena por delitos de pedofilia. Watkins ha resultado herido con un cuchillo en una reyerta con otros dos presos y, a pesar de recibir atención médica, las graves heridas provocadas hicieron que fuera declarado muerto en el acto. Dos hombres de 25 y 43 años han sido detenidos por la policía de West Yorkshire como sospechosos del asesinato y se encuentran bajo custodia policial.