El foro World in Progress ha arrancado este lunes con un tono de urgencia compartida: Europa y el mundo no pueden seguir actuando como si los grandes cambios fueran gestionables con las mismas fórmulas que se usaron en el pasado. Los ponentes —líderes políticos nacionales e internacionales, académicos, empresariales y sociales— coincidieron en que la crisis del multilateralismo es hondamente sistémica y en que las transformaciones se suceden a un ritmo endiablado. En ese escenario de cambio —geopolítico, comercial, tecnológico—, emerge una figura tan poderosa como disruptiva y polarizante: el presidente estadounidense, Donald Trump.