El presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, ha aceptado la dimisión que esta tarde le ha presentado su consejera de Salud, Rocío Hernández, principal señalada en el escándalo por los retrasos en el cribado de cáncer de mama. El dirigente popular se ha visto obligado a tomar una decisión, a la que se había resistido durante toda la semana pasada, cuando empezaron a trascender los casos de mujeres afectadas, ante las dimensiones de una crisis, que no han parado de crecer y que por primera vez han desbordado la capacidad de reacción y de resiliencia de Moreno, desde que hace casi ocho años llegara al Gobierno autónomo