WASHINGTON.- Este viernes por la noche murió Russell Nelson, el presidente de la Iglesia de los Santos de los Últimos Días -o mormones, como se los conoce coloquialmente- a los 101 años. La noticia fue confirmada por su familia y por la propia institución religiosa en un posteo de la red social Instagram. El hombre había asumido el cargo en 2018 y se había convertido así en la persona de mayor edad en ocuparlo.
“Con dolor anunciamos que Russell M. Nelson, querido presidente de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, ha muerto. Tenía 101 años – el presidente más viejo en la historia de la Iglesia”, escribió la Iglesia en un posteo.
En otro comunicado oficial, representantes eclesiásticos indicaron que “falleció pacíficamente” en su casa de Salt Lake City, Utah -capital mormona por excelencia-, pero no especificaron las causas, por lo que se cree que se debe a su avanzada edad.
Nelson tenía 93 años cuando se convirtió en el 17 presidente de la Iglesia Mormona en enero de 2018, tras la muerte de Thomas Monson. El senador republicano de Utah, Mike Lee, se refirió a Nelson como un “líder audaz y visionario, preparado por Dios para dar testimonio de Jesucristo en los tiempos que vivimos”.
Médico de profesión, tuvo una extensa carrera como cirujano cardiotorácico. En 1955, realizó la primera cirugía a corazón abierto en Utah y ejerció diferentes cargos como presidente de la Sociedad de Cirugía Vascular, director de la Junta Americana de Cirugía Torácica, presidente del Consejo de Cirugía Cardiovascular de la Asociación Americana del Corazón y presidente de la Asociación Médica del Estado de la Colmena.
Nelson también participó en la guerra de Corea antes de ser ordenado como apóstol mormón, un cargo de sacerdocio, en 1984. Al líder religioso le sobreviven su segunda esposa, Wendy, ocho de sus hijos, 57 nietos y más de 167 bisnietos, según el comunicado. En 2005, su primera esposa, Dantzel White, falleció a los 78 años de manera “inesperada, pero pacífica”.
Nelson presionó con éxito para que la iglesia mormona clasificara a las parejas del mismo sexo casadas como “apóstatas” -es decir, que abandonaran la religión- y prohibiera a sus hijos menores de 18 años participar en ritos religiosos, incluidos los bautismos. Sin embargo, esta política fue desechada después de que asumiera como presidente.
Durante su periodo en el cargo, también pidió especialmente que no se usara el término “mormón” para referirse a la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, ya que para muchos fieles es considerado “despectivo” o peyorativo.
Ahora, el sucesor de Nelson será elegido después de su funeral por el Quórum de los Doce Apóstoles, quienes, al igual que el presidente de la Iglesia, son considerados profetas por los creyentes.
Fundada en 1830, la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días se considera una organización cristiana, pero basa sus doctrinas en el Libro de Mormón, un texto que supuestamente contiene una versión más completa de las palabras de Jesucristo que la registrada en la Biblia. Además, afirman tener una membresía total de más de 17,5 millones de personas en todo el mundo.
Con información de AFP