El movimiento longevity hub está de moda, pero de nuevo solo tiene el nombre. Las aguas termales para aliviar ciertas dolencias se conocen desde hace siglos y ya en 1931 existía la clínica La Prairie en Montreux (Suiza), que se hizo famosa por la terapia del doctor Paul Niehans que inyectaba células de neonatos de cordero (práctica hoy impensable) para detener el envejecimiento celular. Años más tarde, en 1953, en el lago Constanza (Alemania) se creó la primera clínica de ayuno terapéutico, la Buchinger Wilhelmi, con filial en Marbella desde 1973. La teoría del ayuno, medicalizado y avalado científicamente, promueve la restricción calórica durante 10 o 21 días. Durante ese periodo solo se ingieren caldos, infusiones y zumos. De esta manera, el cuerpo vive de sus reservas grasas para depurar el organismo y obtener energía. Está demostrado que no solo ayuda a perder peso, sino que también previene enfermedades y retrasa el envejecimiento.
Especial Belleza | ‘El País Semanal’Este reportaje forma parte del Especial Belleza de ‘El País Semanal’ del 28 de septiembre.