Acampadas, excursiones al aire libre, escapadas de fin de semana, rutas de senderismo o incluso el recreo en el colegio… Todos estos momentos tienen algo en común: mantener una buena higiene de manos puede ser complicado. Las botellas de jabón líquido ocupan espacio y corren el riesgo de derramarse, mientras que las pastillas tradicionales resultan voluminosas y poco prácticas.