Argentinos.es

¡Suárez vale una Liga!

El FC Barcelona ganó su octava Liga en 11 años. Y pocos se sorprenden. En la Era Messi, los culés naturalizaron el triunfo. E impusieron el modelo Cruyff. En el fútbol 3.0, ser campeones de Liga es regla en Can Barça. Al contrario, el Real Madrid de Florentino vive una tortura interminable. Con el mejor Cristiano Ronaldo y millones de euros invertidos año tras año, los blancos sólo ganaron una Liga de 8. Inequívoca señal de que los millones y las estrellas –por sí solos– no garantizan títulos. Afortunadamente, el fútbol suele premiar a los equipos cuya identidad de juego es reconocible. Viejo axioma del deporte rey: ¡los campeones suelen tener un estilo! Y el Madrid lo muta conforme el humor (y la generosa chequera) de su polémico presidente.

El Barça cantó el alirón con Rijkaard, Guardiola, Vilanova y Luis Enrique. El único entrenador culé que no siguió aquella estela ganadora fue Gerardo Martino. Un abril negro le impidió al FC Barcelona jugar la final de Milano. Al tiempo que puso en riesgo el título de Liga. Por ello, el Madrid y el Atlético se animaron a soñar. Y exigieron al vigente campeón a no fallar. Bajón al margen, el Barça fue un gran campeón. Debió sobreponerse a dos meses de ausencia de Messi, al mazazo de perder el Clásico en el Camp Nou y a una plantilla sin recambio de calidad. Más que nunca, el Barça tuvo 11 titulares… Y suplentes poco fiables. La estrategia de Luis Enrique consistió en cederle el mando a la MSN. El equipo es del Tridente. Y el Tridente lo llevó a ganar 5 títulos de 6 en la temporada pasada. ¿Para qué cambiar? Eso mismo pensó el míster asturiano. Curiosa metamorfosis con idéntico éxito. El FC Barcelona fue brillante campeón con un equipo que jugaba como quería su entrenador (Guardiola) y otro que juega como quieren sus futbolistas (Messi, Suárez y Neymar). Del “guardiolismo” ortodoxo a la MSN heterodoxa. 

¿Nombres propios? Bravo fue vital. El chileno ataja y juega. Y siempre dice presente en los partidos calientes. Piqué es el líder defensivo. Mascherano, el alma del equipo. Alves, un guerrero al que le sobra categoría … ¡Y sangre de campeón! Alba, el motor del carril izquierdo. Rakitic, un todoterreno con gol. Busquets, el socio de todos. Y el disco rígido que almacena como nadie los datos del modelo Masía. Iniesta, el virtuoso garante del estilo. Neymar, la joya que debe aprender que el futuro podrá ser suyo. Pero el presente le pertenece a otros. ¿Messi? Hace rato que Leo desafía el ingenio de aquellos que nos dedicamos a homenajear la palabra. En su particular competencia liguera con CR7, “La Pulga” golea 8 a 1 al portugués.  Para el final, el futbolista de la Liga. ¿Y de Europa? Luis Suárez fue Pichichi, Bota de Oro y se ganó un lugar en la terna del próximo Balón de Oro. El Pistolero oriental desenfundó 40 gritos goleadores. Luis IX de Uruguay es el monarca del Camp Nou. ¿Acaso lo dudan? En la Ciudad Condal, Suárez vale una Liga.

Sergio A. González Bueno

Persigo la oda del gol; un soneto de campeón; un poético caño, una trova de 'rabonas'; una estrofa de Diez; una copla de aliento... ¡Fútbol y letras!

Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos y para mostrarte publicidad relacionada con sus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver Política de cookies
Privacidad